Nuevas historias para contar: Décima cuarta semana. 16, 17 y 18 de febrero de 2011.

“El aprendizaje significativo se empobrece tanto en lo curricular como en lo vincular, si la relación docente-alumno no se consolida.”

Beigbeder, S. y Meloni, M.

Actividades realizadas:

ü Resolución de ejercicios matemáticos referentes a la potenciación y sus propiedades.

ü Planificación de actividades y estrategias para ser aplicadas en el laboratorio de computación.

ü Orientación y organización de material bibliográfico concerniente al cuerpo humano.

ü Orientación sobre el funcionamiento del aparato reproductor con la ayuda del computador.

ü Orientación en el trazado de rectas y circunferencias para resolver problemas.

ü Elaboración del cuerpo humano utilizando la técnica de sombra chinesca.

Esta semana aprendí… que la comunicación durante el desarrollo de una clase, puede estar centrada en el docente o circular entre los integrantes; también puede ser estremecedora durante la ejecución de trabajos grupales o mínima cuando se desarrolla una tarea en forma individual y silenciosa. Por consiguiente, el aula constituye un espacio de comunicación en el que todos aprenden unos de otros. El educador comunica mediante sus actitudes, con su vestimenta, a través de su presencia e incluso con su ausencia. Además, en el aula se pueden observar otras formas de comunicación, pues los estudiantes se valen de códigos gestuales y corporales para establecer algunas conversaciones; esto nos puede ayudar a detectar si la comunicación en el grupo es fluida, si incluye a la totalidad de los miembros del grupo o excluye a algunos de sus integrantes, si circula dentro de cada sub grupo, pero no en la totalidad del colectivo.

Por otra parte, en algunas ocasiones, la comunicación está presente en formas de agresión, a través de palabras fuertes y ofesnsivas; por lo tanto, debemos actuar con urgencia y cambiarlas por otras que resulten ser más apropiadas. Es posible describir la tarea de quien educa, como la de una persona que debe facilitar las comunicaciones interpersonales, que debe tender a ampliar la red y los códigos empleados, además debe favorecer la retroalimentación y la multiplicación de significados, pues “… lo comunicacional en el hecho educativo es mucho más profundo, se relaciona con mi propio ser, con mi pasado, con las interacciones presentes y con el futuro”.

Crear un buen clima grupal, en el que todos se sientan seguros y confiados, requiere una buena comunicación y, para ello, el educador debe garantizar la libertad de expresión que facilite a todos los niños poder mostrarse sin temor a burlas, agresiones o sanciones. El respeto es la primera condición del buen clima dentro y fuera del aula.